martes, abril 25, 2006

"Calle Mayor" de Bardem


Ayer, lunes por la noche, emitieron "Calle Mayor" en el programa "versión española" de la segunda cadena.
Después de ver este peliculón se me plantea la siguiente pregunta: ¿a los directores españoles actuales no les da un poco de vergüenza ver como hace 50 años, con cuatro duros y luchando contra la censura y la represión (el mismo Bardem se pasó unos diitas de "visita" en el trullo), se podían hacer obras maestras del cine?
Cuando hay ideas y ganas de hacer buen cine, no hay nada que puede detener la creatividad de un maestro, como fue J. A. Bardem. Él y Berlanga, representaron el momento culminante del cine español. No ganaron Oscars, no se forraron; pero hicieron auténticas maravillas.
"Calle Mayor" no envejece, al contrario, gana con el tiempo. Un dramón que muestra la gris vida de la España gris de los años 50, con todas sus miserias, sumida en la mediocridad de una sociedad hipócrita que se encuentra totalmente anquilosada tanto social como politicamente.
Pero la película trasciende el marco histórico y sería transportable a otras épocas o lugares.

Pero claro, ahora los cineastas españoles se dedican a retratar la vida actual, en la cual una monja lesbiana se lo monta con un picoleto transexual y una yonkie lagarterana: real como la vida misma...
Bueno, la última "originalidad" consiste en convertir una novela de caballerías en no sé qué cosa.
Es cierto que la novela Tirante el Blanco" tiene un contenido importante de amor sensual, pero de esto a convertirla en una pseudo película erótica va un abismo. Bueno, el cartel es la monda: "tirante el blanco" y lo que más se ve es el ombligo perfecto de una supermodelo actual, de esos "construidos" en el gimnasio o en "corporación dermoestética".
Vamos, que con estas cosas, casi da ganas de que vuelva la censura.

martes, abril 18, 2006

"Plan oculto". Agradable entretenimiento.



Cuatro personas vestidas con monos de pintores entran en el concurrido vestíbulo de la sucursal de Wall Street del conocido banco Manhattan Trust. En cuestión de segundos, los cuatro falsos pintores, basándose en un plan estudiado al milímetro, controlan la sucursal, y toman como rehenes a cincuenta personas entre clientes y personal. El detective Keith Frazier (Denzel Washington), especializado en toma de rehenes perteneciente a la policía de Nueva York recibe la orden de entablar negociaciones con el líder de los atracadores, Dalton Russell (Clive Owen), y conseguir la liberación de los rehenes. Dalton Russell demuestra ser un oponente brillante, inteligente, frío y calculador, un auténtico maestro de marionetas cuyo plan ha sido cuidadosamente diseñado para desorientar a los rehenes y a las autoridades. Las sospechas del detective Frazier de que todo esto esconde algo más se ven corroboradas cuando aparece Madeline White (Jodie Foster), una influyente mujer con objetivos nada claros, que pide ver personalmente al jefe de los atracadores.

Esta es la trama de "Plan oculto", una película de Spike Lee en la cual el director afroamericano se desvía radicalmente de su trayectoría de cineasta preocupado fundamentalmente por temas sociales y políticos. Sin embargo, el acercamiento del director a un cine básicamente comercial no deja de ser una obra interesante, inteligente y, sobre todo, muy entretenida. Todo ello se apoya en un ingenioso guión, que da una vuelta de tuerca más al conocido tema del "atraco perfecto" y en una terna excelente de actores: Denzel Washington, Clive Owen y Jodie Foster. Personalmente, destacaría la labor de esta última, que aunque participa de una manera más secundaria, está magnífica (como siempre) en su papel.
Quizás el final (tranquilos, que no lo voy a contar) es exageradamente fantasioso y espectacular, pero el resultado final es una película que se deja ver muy bien y que entretiene a las mil maravillas durante un par de horitas.

Lo que me pregunto yo es si este tipo de películas ¿no les darán ideas a los verdaderos delincuentes?

lunes, abril 17, 2006

"V de vendetta". Muy interesante película


V de Vendetta está ambientada en un futuro próximo: Inglaterra se ha convertido en un estado totalitario y fascista. Evey (Natalie Portman) es rescatada de una situación de vida o muerte por un misterioso enmascarado conocido como V. V es un hombre sumamente complejo, instruido, extravagante, tierno e intelectual, que dedica su vida a liberar a los ciudadanos de las garras de aquellos que les someten mediante el terror. Pero al mismo tiempo es amargo, solitario y violento, y está obsesionado por la venganza personal. Sus actos no dejan de ser una forma de terrorismo. V condenará el carácter tiránico de sus dirigentes e invitará a los ciudadanos a unirse a él en las tinieblas del Parlamento el 5 de noviembre: el día de Guy Fawkes. Un día como ese del año 1605 Guy Fawkes fue descubierto en un túnel bajo el Parlamento con 36 barriles de pólvora. En compañía de otros conspiradores había planificado lo que más tarde se conocería como «la conspiración de la pólvora» en reacción a la tiranía del gobierno de Jacobo I. Fawkes y el resto de saboteadores fueron ahorcados, destripados y descuartizados, y su plan para derrocar el gobierno jamás llegó a perpetrarse. Retomando el espíritu de esa rebelión y como conmemoración de aquel día, V promete consumar la conspiración fallida del 5 de noviembre de 1605 por la que Fawkes fue ejecutado: detonar el Parlamento británico. Cuando Evey descubre la verdad acerca del misterioso pasado de V, también descubre su propia verdad, y se convierte en su leal aliada para ejecutar un plan que pretende encender la llama de una revolución, devolver la libertad y la justicia a una sociedad asfixiada por la crueldad y la corrupción.
La cinta está basada en el exitoso comic del mismo título cuyo guionista es el famoso Alan Moore, y en el que David Lloyd se ocupa de los dibujos.

Tengo que reconocer que me ha gustado mucho esta película. El guión me parece muy acertado y está completamente alejado de lo que es el cine americano de hoy en día. El que vaya pensando que se trata de la típica cinta con efectos especiales y mucha acción se va a llevar una considerable decepción. Al contrario, el guión nos hace reflexionar sobre problemas políticos plenamente en vigor en los momentos actuales. El camino al fascismo y hacia la intolerancia que está tomando el mundo, que se apoya en el miedo del pueblo a lo que es distinto. En cierto modo, nos encontramos ante una apología total del anarquismo enfrentado al poder y control de un estado totalitario que nos prohibe todo tipo de pensamiento. Cuando el pueblo tiene miedo y es manipulado por los redentores que nos pretenden decir quienes son los buenos y quienes son los malos, cuando bajo el pretexto de la seguridad se eliminan las libertades individuales y el derecho de disentir, el camino hacia el fascismo está asegurado. Todo ello resulta demasiado corriente en el mundo actual: el "eje del mal", el "moro" malo, ...
Si a todo esto le añadimos una estética muy cuidada y una ambientación no excesivamente espectacular, pero si muy efectiva y correcta, tenemos una película muy recomendable. No hay que olvidar tampoco a la atractiva Natalie, que está muy guapa incluso con el pelo rapado y cumple muy bien con su papel.
Quizás el único pero, es algo de simplismo en la temática global de la película. Se pretende simplificar demasiado un tema tan complejo. Sin embargo, en la sociedad estupidizada en que nos estamos convirtiendo, son de agradecer apuestas como las que representa este filme, que pueden llegar a un público mayoritario.